arroz congri
- 300 g de frijoles rojos
800 gramos de arroz blanco
800 ml de caldo de judías rojas
1 cebolla blanca grande
6 a 12 dientes de ajo
1/2 pimiento verde
1/2 pimiento rojo
(Puedes sustituir los pimientos por unos cuantos chiles)
1/2 cucharadita de orégano molido
1/2 cucharadita de comino
1 hoja de laurel grande
4 cucharadas de aceite vegetal
sal al gusto
1 chorrito de vinagre
2 cucharadas de manteca
Hay muchas formas de preparar congrí, dependiendo de la región del país, como el Ajiaco por ejemplo. Ya hemos hablado antes del congri cubano, pero claro, es relevante aclarar nuestra receta.
Así es como se hace en La Habana y en toda la región occidental, y eso es lo que me encanta cocinar.
Aquí en casa preferimos acompañar el congrí con filetes de cerdo encebollados, o trozos de cerdo fritos, o pollo asado y plátano maduro frito. Pero en realidad el congrí combina con casi todo y por ello sería considerado una joya del arte culinario cubano, una parte innegable de la identidad de la nación.
Preparación :
La noche anterior, lava y remoja los frijoles rojos. Debo aclarar que se puede hacer con frijoles negros, pero en este caso se trata de Moros y Cristianos, plato hermano del congrí en la cocina cubana, que también incluye tocino en su elaboración.
A la mañana siguiente, cocínalos con la misma agua del remojo, la hoja de laurel, un trozo de ají y una pizca de sal, hasta que estén tiernos, unos 30 minutos.
Una vez enfriados y puedas manipularlos, mide 800ml de caldo y separa los granos.
En la sartén que vas a cocinar el congrí (recomiendo usar una sartén de hierro, o la olla a presión), calienta el aceite, y dora la cebolla picada, el ají y unas vainas de ajo machacado hasta que la cebolla esté transparente. alrededor de 5 minutos.
A esta salsa le añades después el arroz (que ya has lavado, claro) y remueves bien unos segundos para que se impregne bien de la grasa y los condimentos.
Luego agregas los frijoles y repites el mismo proceso que con el arroz, removiendo bien por unos segundos para que se mezcle todo.
Luego agregas el caldo que ya mediste, más el comino, el orégano y la sal.
Cocinas a fuego alto hasta que hierva, luego lo revuelves y bajas el fuego, dejando que se cocine a fuego lento, tapado, hasta que el arroz esté bien tierno.
Aparte, sofreímos unos dientes de ajo machacados más con las 2 cucharadas adicionales de grasa y los añadimos al arroz ya cocido con el chorrito de vinagre y una pizca final de comino. Mezclar bien y estará bueno.
Cuando hayas terminado, corta una naranja amarga (o limas) en ruedas y colócalas encima del arroz. Taparlo y dejarlo así unos 10 o 15 minutos antes de servir.
¡Esto le dará un sutil y exquisito sabor cítrico!
Buen provecho a todos los entusiastas de Cuba.